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PlayStation 4 debuta con el respaldo de jugadores e industria pero no ofrece aún ningún juego que justifique el salto a la nueva generación
Sobre el papel, la PlayStation 4 no tiene rival. Tecnológicamente es más poderosa que el resto de consolas de nueva generación (Xbox One y WiiU) y cuenta con el respaldo abrumador del público, a juzgar por la entusiasta acogida en EE UU y el récord de reservas en Europa, donde este viernes se pone a la venta. Un escenario casi idílico del que Sony no disfrutaba desde los tiempos dorados de la primera PlayStation (1995) y de su sucesora, la PlayStation 2 (2000), que sigue siendo la consola más vendida de la historia, con más de 155 millones. También los medios especializados y, sobre todo, los estudios que hacen juegos, se han encargado de inflar el fenómeno. No pasa un día sin que algún gurú de la industria cante las bondades de la nueva PS4. Está claro que el viento sopla a su favor.
